Si quieres sobrevivir,
más te vale empezar a ser egoísta, no es tan difícil. No dependas de nadie,
aprende las cosas por ti mismo. Si te caes, no te levantes apoyándote en el
hombro de otro. Usa el suelo para mantenerte de pie, no vivas en las nubes. Esto
es el mundo real, y ahora mismo está podrido. Si quieres seguir con vida, márcate
unas reglas y aplícalas, si no, date por muerto. Descubre tus habilidades y mejóralas.
No subestimes a nadie, ni siquiera a ti mismo. Si necesitas armas adáptalas a
tus habilidades. No permitas que nadie coja tus armas, jamás. Usa ropa cómoda,
que permita moverte con facilidad y que te deje correr, pero que te sirva de
protección, especialmente para las extremidades. Si alguien te hace desconfiar,
desconfía. Sigue tus instintos, pero piensa las cosas siempre antes de actuar.
Quieres seguir vivo, ¿recuerdas?
Si alguien no
puede controlar su mutación, mátalo. Que nadie te toque hasta que no sepas que
clase de mutación e infección tiene. Que te digan cómo se han infectado, cuándo
y dónde. Averigua si esa persona está sola o tiene compañía, sobre todo si
viene de fuera. A menos que sea un caso extremo, nunca reveles tu escondite. Nunca.
Y cada vez que vuelvas a tu posición no dejes de mirar hacia atrás, no queremos
visitas inesperadas en casa. Asegúrate cien por cien que nadie ni nada te ha
visto. Asegura tus entradas. Ten varios escondites, no demasiado cercanos entre
sí, no queremos ser fáciles de cazar. Y jamás uses el mismo sitio como entrada
y salida. Por favor, no comas lo primero que encuentres, solo faltaría que te
matara comida en mal estado.
Recuerda revisar
todo el cuerpo si al salir has sido atacado. Y si te escondes acompañado, haz
que la otra persona haga lo mismo. Oblígala. Recuerda que las personas no son
los únicos seres que transmiten y tienen las infecciones.
Por tu propio
bien, no la cagues.
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